“Creo sinceramente que la presente obra es una mina de hallazgos, llena de agradables sorpresas”, así comenzaba el “modesto prólogo” que el diseñador suizo Donald Brun escribió en 1964 para el volumen que recogía trabajos de 18 grafistas de la Agrupación FAD, editado para conmemorar sus dos primeros años de actividad.
En un estricto blanco y negro –se supone que por razones técnicas y tal vez presupuestarias– con impresión de “Francisco Casamajó”, la empresa de artes gráficas de referencia del FAD en aquellos años, se presentaba un espectacular despliegue de brillantes trabajos de nombres habituales en este blog y otros con menor proyección como José Martínez Gómez o Francisco Graus.
En el interesante texto de introducción del libro, el crítico de diseño Joan Perucho hablaba, citando a Paul Eluard, de “la desnuda fertilidad del ojo a través de la imagen”, y de imágenes que no requieren esfuerzo de comprensión ni de entendimiento porque pertenecen al lenguaje del silencio que no puede ser articulado en palabras.
Perucho definía lo necesario para ser un buen grafista afirmando que “lo gráfico se define aproximadamente por la concisión gestual y la expresión. El grafista (…) más que explicar, sugiere; más que analizar sintetiza”.
Las ilustraciones que se reproducen en este post servían de apertura a los capítulos correspondientes a los 18 grafistas y son una perfecta formalización de las palabras de Perucho.
7 comentarios
Beta Albuixech Miró
20/09/2013
Siempre sorprendente…un hallazgo GENIAL, gracias Emilio.
Un beso muy muy grande
Beta
Emilio Gil
20/09/2013
Muchas gracias Beta por tu comentario tan cariñoso. Un beso
JOSE MARIA CEREZO
20/09/2013
“lo gráfico se define aproximadamente por la concisión gestual y la expresión. El grafista (…) más que explicar, sugiere; más que analizar sintetiza”.
¡Qué sabio!
Luis Gil
20/09/2013
Me encantan estos grafismos, creo que dicen mucho, son muy expresivos en su escueto lenguaje … geniales!!!
Un fuerte abrazo, Luis
Javier García del Olmo
20/09/2013
Efectivamente, Emilio, cuando en 1962 entré a trabajar en Edicolor (imprenta de referencia en Madrid del Grupo 13), los trabajos se imprimían en negro, bicolor y tricomía, la mayor de las veces. Con la habilidad de los fotomecánicos de la época, se conseguía un efecto de cuatricomía muy aceptable (con la gama fotográfica) modificando el cian, el magenta y el amarillo se conseguía el “efecto” negro. Así, el ahorro era importante. Con esta pequeña selección del FAD se comprende muy bien la grandeza del diseño bien ejecutado que, incluso, en monocolor es magnífico. ¡Ah, el color! Aún sin presupuesto… “el ventalle del cedro ayre daba”. Traído a colación del clásico, el aire de la inspiración y el grafito vegetal ¡una mina de creatividad! ¡Qué generación! Sigue así, Emilio, queda mucho por recuperar y mostrar. Gracias por refrescar mi memoria.
Lluís Morillas
20/09/2013
Emilio,
Como ya has demostrado tantas veces eres un magnífico embajador de nuestros Pioneros,
Gracias por este necesario trabajo de investigación y divulgación de los orígenes del diseño de nuestro país.
Grafistas Fad en b/n es un regalo para la vista y la sensibilidad creativa gráfica.
Lluis Morillas
Jacinta Delgado
21/09/2013
… imágenes que no requieren esfuerzo de comprensión ni de entendimiento porque pertenecen al lenguaje del silencio que no puede ser articulado en palabras …
gracias de verdad Emilio una vez mas por tu trabajo.
j.