Pedro García-Ramos es, como él se define, asesor en proyectos de muesografía y –esto lo añado yo– evidentemente mucho más: una de las referencias en diseño expositivo en España con decenas de grandes trabajos, algunos de ellos históricos en esta especialidad.

Pedro ha venido colaborando desde hace tiempo con este blog facilitando un material de gran interés en varias de estas entradas. Suyo fue el material para los dos “0 Figura” publicados recientemente o para “Exposiciones en Darro” y la dedicada a la revista “Nueva Forma”.

García-Ramos ha venido formado a lo largo de cincuenta años un fondo bibliográfico, fotográfico y documental de un enorme interés. El fondo se fue nutriendo de las adquisiciones de material necesario para documentación de los trabajos que se iban acometiendo en los estudios Macua & García-Ramos, Trazados S.L. y Producciones I+D+C dedicados a la museografía, la producción audiovisual y la gestión cultural, así como de aportaciones de otros bibliófilos como Luis González Robles y del propio interés coleccionista del diseñador. Pedro, en su múltiple faceta profesional de pintor, diseñador y partícipe activo en la vida cultural española, ha mantenido su colección en perfecto estado, catalogada en su mayor parte con el esfuerzo económico que ese trabajo supone.

La importancia del fondo radica en su unidad temática y la complementariedad de sus bloques entre si, característica que le confiere de una enorme utilidad para el estudio del arte contemporáneo español de las décadas de los 60, 70, 80 y 90 del siglo XX.

Como el propio García-Ramos plantea: “el Fondo-Colección ha sobrepasado los límites que puede asumir una colección privada y casi personal, con pocos medios económicos y funcionales, por lo que hace desde hace tiempo nuestro objetivo es que el Fondo pase a instituciones de importancia –públicas o privadas– que den a la colección la oportunidad de prestar un servicio adecuado, tanto a la docencia como a la investigación”.

Las imágenes de este post pertenecen a este Fondo. Se trata de los elementos del material de diseño gráfico y museográfico realizados para la I Bienal Internacional de Obra Gráfica y Arte Seriado que se celebró en Segovia, en el otoño de 1974. Fue una ambiciosa empresa, promovida y organizada por PROPAC (Promoción del Patrimonio Cultural S. A.), dentro de los actos culturales celebrados con motivo del Segundo Milenio del Acueducto y bajo el soporte Institucional de la Fundación Enrique IV de Castilla. Un comité técnico de la Bienal con José María Ballester al frente, la dirección del arquitecto segoviano Alberto García Gil y la coordinación de la historiadora de Arte Julia Silva llevaron adelante con éxito internacional la compleja tarea de una primera bienal de esa envergadura. El estudio Macua & García-Ramos asumió la coordinación y las tareas de promoción y Diseño. Los más importantes artistas del momento, en su faceta de grabadores, participaron en la exposición que tuvo su sede en el Torreón del Siglo XV segoviano y en las actividades organizadas por la Bienal. La empresa PROPAC tuvo una importante actividad en el panorama artístico español, pero la Bienal por diferentes razones, tuvo un breve recorrido. La producción gráfica corrió a cargo TeyPe, una de las imprentas pioneras de la época.