Ya en la cubierta de esta “Selección de caracteres de imprenta” aparecen cinco tipos diferentes: una “F” capitular –que también utilizaría en alguna época como imagen de su “Instituto de Arte Gráfico”–, una “Española seminegra chupada”; su nombre propio compuesto en caracteres de caligrafía inglesa, una “Helénica” y, para cerrar, una Bodoni bold referenciada como “Normanda” en el propio catálogo.

Filograf (ver post anterior), fundado en 1947, se caracterizó por ser un estudio-taller de diseño en el que el amor a la letra y el entusiasmo por el oficio que demostró Ricard Giralt Miracle a lo largo de toda su trayectoria profesional le llevaron a la edición de pequeñas maravillas como este muestrario de los tipos, orlas, lutos y letras capitulares disponibles en la imprenta. En algunos aspectos Filograf podría ser el equivalente español al Curwen Press británico en sus inicios.

Giralt Miracle es el único grafista dentro de esta generación de pioneros que reunía la doble condición de diseñador e impresor de sus propias creaciones lo que le llevaba, en algunas ocasiones como las famosas “plaquetes” (ver post anterior), a la consecución de unos diseños en los que la superposición de colores y capas estaban cercanas a los resultados que hoy se consiguen con los programas de trabajo informáticos tipo Photoshop. En ese sentido me gusta pensar que Ricard Giralt Miracle fue el único diseñador de la época que ya “trabajaba con el ordenador”. Como su hijo Daniel escribió, “Filograf fue un sueño y una realidad. Ricard Giralt Miracle aspiró toda su vida a poder dirigir la orquesta de recursos gráficos (papeles, tintas, tipos, impresiones, reimpresiones, manipulados, troqueles, etc) no por el ansia de controlar sino para alcanzar los objetivos que se proponía”.

Si como el diseñador pensaba, la tipografía era la ciencia y el arte generadoras de la cultura gráfica, y el que conocía, apreciaba y dominaba la letra estaba legitimado a ejercer la profesión de tipógrafo y por extensión de grafista, este espécimen de Filograf fue la materialización de su convencimiento y una pieza que es posible consultar en el Arxiu Giralt Miracle de Barcelona.