En las navidades de 1969 el tándem de diseñadores asturianos Elías + Santamarina realizaron la felicitación de los Grafistas del FAD recogiendo la forma particular de ilustrar el momento de la creación según el estilo particular de 28 de sus colegas en la Asociación: Baqués, Barba, Bas, Costa, Creus, Cruspinera, Domenech, Dorado, Escutia, García Benavides, García Yagüe, Giralt Miracle, Grau, Graus, Huguet, Martínez, Moradell, Morillas, Parramón, Pedragosa, Santamarina, Ribas, Romero, Santandreu, Seix Perearnau, Serrasolas, Vellvé y Vendrell.
Con un lenguaje que remitía a las teorías de Roland Barthes, el redactor del texto que acompañaba la felicitación incidía sobre una de las reflexiones básicas a la hora de diseñar: lo importante es la idea y no el estilo, ni el recurso gráfico, más o menos brillante, más o menos a la moda del momento.
La felicitación se resolvió en un desplegable de cuatro cuerpos que en formato cerrado medía 18×18 centímetros y se acompañaba del siguiente texto:
“Las ideas de los grafistas son imágenes. Su pensamiento, gráfico. Su deseo de comunicación profundamente icónico. La cabeza, reconocida y aceptada de siempre como centro generador del pensamiento, intelectual o gráfico, cristaliza siempre en el emisor como en el receptor unos signos cargados de poder significante que con el tiempo y la reiteración se transforman en palabras de un nuevo código. Por ello, los Grafistas del FAD no solamente han extravertido las imágenes que les son propias y que han divulgado a lo largo del año, sino que han intravertido su pensamiento con el propósito de dar a conocer de forma gráfica lo más íntimo de su mente: su propia “imago”, en acto de manifiesta sinceridad”.
1 comentario
J4M
09/11/2013
Gracias por este artículo.